martes, 28 de febrero de 2012

Uno y otro día, las barcas,..

(Médanos (II)

Médanos

En Oviedo

Brasa II


Mover la brisa.
Llegar a la vida normal
después de tantos años sin saber
que la experiencia de crear incita
según la paradoja de lo desandado,
pues siempre habrá ante ti un escaño
al que ascender, un médano, una casa
junto al mar, un beso al poso
de lo probable en esta brisa
que da el toque íntimo y feliz
al hogar de tus sueños.

Josefa Navarro Zamora ( in memoriam)


Una mujer sin fronteras, igual que la escritura actual, entretenida en los resquicios, en el diálogo, y dispuesta siempre a despejar cualquier interrogación, ya fuera propia o ajena. Tal vez por ello, cuando me confesó que, en alguna ocasión, había robado (“puse en las manos de un aplicado alumno pobre el libro escolar que el caprichoso alumno rico despreciaba”) era obligado traducir que, también como la escritura, la línea recta no es, con frecuencia, el camino más corto para solucionar un texto o un problema, deducción de la cual aprendemos asimismo que la parte de verdad correspondiente se haga exclusivamente visible a partir del grado de compromiso humano que la persona adquiera con sus semejantes, el mejor espejo, por otra parte, para poder mirarse. Algo que nuestra protagonista, doña Josefa Navarro Zamora (Jabuguillo, 1897), supo practicar a diario, según los émbolos de su corazón le exigían y nunca dejó de ser la respuesta adecuada de una auténtica maestra (nacional y de la vida), cuya primera plaza  profesional la obtuvo en Coria del Río (1926), en plena Dictadura de Primo de Rivera:
            -…Una escuela de párvulos, mixta, nueva –la tercera que se creó en Andalucía-, en el soberado de una casa particular, y en muy malas condiciones. Luego, el Ayuntamiento alquiló una vivienda mejor…Compré los métodos Montessori. Un acuarelista me hizo grandes dibujos en las paredes. Empezaba por enseñar las cinco vocales con un aro de hierro y un gancho…La clase, digna de verse. Nueve inspectores me visitaron y todos me dieron su Voto de Gracia (Macías Rico, J.L: “Josefa Navarro. Un  siglo de docencia”. Andalucía Educativa; Año I, Nº 2, 1997, pág. 48).
            Tras aquella primera experiencia, en puntos muy diversos del mapa regional y del pensamiento quedaron sus enseñanzas. No le faltaron –lógico- reconocimientos, (Cruz de Alfonso X; nombres de calle, de centros, homenajes…) Más de cien años de entrega… Pero el tiempo no nos despoja de nada; al contrario, nos regala cosas: hoy, Día de Andalucía, un recuerdo, un retrato: el de Josefa Navarro Zamora. Un ejemplo a no olvidar, a seguir.

martes, 21 de febrero de 2012

Cuestión de responsabilidad


           
            “Encuentre usted a Livingstone”, fue la orden dada, en 1869, por Gordon Bennet, director del New York Herald, a su corresponsal en Madrid, Henry Norton Stanley, y a propósito de la suerte incierta, en la selva africana, de aquel famoso explorador. El año y pico que duró la búsqueda (con final feliz), dio, sin embargo, para tanto (crónicas de la inauguración del Canal de Suez; del descubrimiento de los cimientos del templo de Salomón, de la Guerra de Crimea, etc.), que la citada misión se convirtió en ejemplo destacado de la Historia del Periodismo.
            Claro que, en la actualidad y con la que está cayendo, ni el mandato de referencia ni tampoco su tiempo de resolución se hubieran definido como entonces, según las noticias de mayor interés se centran ahora en la crisis  económica y financiara y, por ello, no es preciso realizar largos desplazamientos  para encontrar ricos filones informativos, sean los que fueren; adaptables, además, a las apetencias de cualquier género periodístico y con posibilidades de provocar una onda expansiva (en el sentido también que se desee), de alcance ilimitado las más de las veces. Todo, derivado de la coyuntura que vive un mundo, éste (por no ser necesario, igualmente, viajar a otro lejano), fabricado no sabemos - ¿o sí?- a la medida de cuántos y quiénes, y en el cual, la globalización, las nuevas tecnologías y las migraciones han venido a trastocar y reconducir los conceptos de espacio y territorio hacia aplicaciones inimaginables.
            En consecuencia, pisamos una tierra que ya no es ni será la misma que dejáramos no ha mucho. A velocidades de vértigo cambian los mapas, las ideas Lo que, por supuesto, no conlleva la traducción negativa de los tres factores antes mencionados. Menos, que se desvirtúe el valor de la comunicación. Para aliviar tensiones (¡falta hace!), mejor reflexionar sobre nuestro posicionamiento individual y colectivo en las coordenadas que nos han tocado en suerte.”Encuentre usted su responsabilidad ética”. Esta es la orden.  El orden para salir del poso. Y del pozo.

martes, 14 de febrero de 2012

Ningún frío podrá apagar sus nombres...

"Sombra del paraíso"

Brasa I


En el hecho de cada fuego;
mas nunca será igual:
va con la naturaleza del texto,
de quien arde,
templada hoguera del calor humano,
vida en la mejor flama,
amor ahora en mí hacia la mar,
faro único reconocible
desde cualquier vigilia                                     

Elena del mundo


Apurar cada día en tareas que nunca pudieran ser reprochadas es, con seguridad, objetivo principal para la mayoría de las personas. Mas ¿de quién o de quiénes, en particular, hablamos; desde dónde? Porque aun reconociendo que, sobre el campo de la vida, el trigo destaca siempre sobre la cizaña, cuesta creerlo; cuenta más lo contrario, tan imposible como resulta mantener firme aquella primera fiel frente a un mundo colmado de excesos, envilecido y agitado, ante el cual, y aunque para él tú aparezcas como “huésped inoportuno”, la mejor respuesta, tuya también y desde ti, sea la continuidad y ese denuedo necesario para conseguir lo que quieres ¿Difícil? A no dudarlo, pero hubo, hay y habrá ejemplos a los que acogerte, lecturas que hacer propias, ojos que arropen tu verdad, bellezas que se abran a tu camino. Con sólo apuntar a las llanuras de tu  proximidad tendrás la ocasión de comprobarlo…
            De cualquier modo, conviene no olvidar que se trata de un trayecto duro y  largo, viaje entre aventuras y experiencias hacia la Ítaca soñada cuya realidad (atrás y ya vencidos los lestrigones, los cíclopes y el Poseidón de turno), proporcionará gran alegría. La razón impone, pues, perseverancia. Y altura de pensamiento. Luego, presente al fin la felicidad buscada, el destino, atento igualmente a sus responsabilidades, ha de seguir, por ley, exigiéndote. Pero entonces, ganada la delicia de haberte encontrado en tus espacios (lo más a obtener), todo será distinto, sonora soledad, playas interminables, mar (amor), luces dispuestas a la cita que se preste.
            Cuando traduzco tu afán de formación, joven Elena, con esta mirada, tal vez no esté haciendo otra cosa que procurar asimismo tu actitud. Nada nuevo. Lógico proceder, según sé de tu relato y tengo, además, la suerte de proclamarlo. Cante hondo de ti  a la cultura del esfuerzo. Y no conozco música alternativa.


martes, 7 de febrero de 2012

Cuando calienta el sol...


…Aquí en la playa, o donde sea, no sólo el vibrar se hace sentir en los cuerpos de los amantes, sino también en el de la tierra toda, con sus lagartos y demás bichos. Como debe ser, por más que, en general, no existan tiempos y lugares que hayan dejado de escuchar en alguna ocasión sus propias quejas. Rara vez, sin embargo, estas últimas se oyeron en Huelva, en la cual, frente a las rigurosas condiciones meteorológicas de otros sitios, cualquier frío (incluido el de días atrás), suele registrarse como mero y curioso apunte de hemeroteca; pelillo a la mar, si acaso. Y a disfrutar regularmente de la  benignidad de la climatología provincial, una bendición, un don que da para mucho y muchos.
            Lo que a partir de ahora se espera, pues, tan pronto el tiempo de Huelva, sellado con denominación de origen, llame con personalísima voz a los elementos naturales que envuelve y asiste, es ese despertar conjunto, nunca esquivo ni infiel, el mismo que cuando calienta el sol aquí en La Costa, y de igual modo en La Campiña, El Andévalo, La Cuenca Minera y La Sierra,  es  garantía de presente y de futuro.
            Falta hace tal resurgimiento, según la actual depresión económica, “bicha social” de sangre y conciencia frías, erigida en rostro – y espejo- de no sabemos cuántos desconocidos malvados, al congelar el valor de los recursos productivos, está causando en el mundo laboral el daño que se observa. Huelva, no obstante, dispone de activos asociados a su físico que, sin ángeles y demonios por medio, y sobre cotas de desarrollo calculadas, servirían para revertir la situación. Por ello, Cuando calienta el sol no puede responder únicamente  al título comercial de la  vieja canción de los Hermanos Rigual. Antes bien, cerca de la calidez de aquella y con la realidad en mano, aquí, en Fitur o Pekín pretende ser hoy recordatoria del enorme caudal turístico que Huelva atesora. No, no es vana la redundancia en determinadas circunstancias. Como tampoco lo es que, al amparo de la entereza, se procuren los cauces para esta riqueza disipada.   
  

jueves, 2 de febrero de 2012

En tu luz

A ti




En tu lectura. Por si hubiera cielo
y este discurso, más lento, dejara
traducir lo que queda de nuestro viejo sueño.

En tu lectura, ya se sabe,
quien pudo antes rezar, y en tanta  luz
extraviar esta duda con que pisas
cada tiempo y permite que a tu lado
la vida sea más fácil.

En tu lectura, la certeza
que otros, tal vez,  destejerán
en ti sin más esfuerzo;
pero nunca en la levedad,
el aroma o el abandono con que doy
los usos de mi lengua a tus sentidos.